El Poder de la Voluntad: Derek Redmond y su Inolvidable Carrera

¡Bienvenidos a Vidas Ilustres, donde las vidas extraordinarias cobran vida! Sumérgete en un mundo de inspiración y descubre las fascinantes historias de líderes, artistas, científicos y filósofos que han dejado huella en la historia. En nuestro artículo principal, "El Poder de la Voluntad: Derek Redmond y su Inolvidable Carrera" te adentrarás en la emocionante biografía de un destacado atleta cuya determinación y coraje trascendieron las barreras del deporte. ¿Estás listo para descubrir la increíble historia de Derek Redmond? ¡Acompáñanos en este viaje de descubrimiento y superación!

Introducción

¿Quién es Derek Redmond?

Derek Redmond es un exatleta británico nacido el 3 de septiembre de 1965 en Bletchley, Buckinghamshire, Inglaterra. Es conocido por su destacada carrera como corredor de pista corta y su inolvidable actuación en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992.

Redmond es recordado no solo por sus logros deportivos, sino también por su determinación y valentía en medio de la adversidad, lo que lo convierte en un ejemplo de superación personal y fortaleza mental.

Su carrera deportiva estuvo marcada por momentos de gloria, pero también por desafíos y obstáculos que enfrentó con coraje y determinación.

Contexto histórico y relevancia actual

Derek Redmond es recordado por su inolvidable carrera en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En la semifinal de los 400 metros, Redmond, quien ya había sufrido lesiones en el pasado, se desgarró el tendón de la corva. A pesar del intenso dolor, se levantó y decidió terminar la carrera, cojeando con determinación hacia la línea de meta, mientras su padre lo ayudaba a cruzar.

Este acto de valentía y perseverancia conmovió al mundo entero, convirtiéndose en un símbolo de la lucha contra la adversidad y la importancia de la voluntad inquebrantable. El legado de Derek Redmond sigue resonando en la actualidad, sirviendo como inspiración para atletas, emprendedores y cualquier persona que se enfrente a desafíos.

Su historia es recordada en innumerables videos motivacionales y discursos, demostrando que el poder de la voluntad puede superar incluso las circunstancias más desalentadoras. A través de su ejemplo, Redmond ha dejado una huella imborrable en el mundo del deporte y más allá, recordándonos la importancia de la determinación y la superación personal.

Infancia y Juventud

Derek Redmond nació el 3 de septiembre de 1965 en Bletchley, Buckinghamshire, Inglaterra. Proveniente de una familia trabajadora, desde temprana edad mostró interés por el deporte, especialmente por el atletismo, influenciado por su padre, quien también había sido corredor. Este ambiente familiar marcó el inicio de la carrera de uno de los atletas más inspiradores de la historia olímpica.

A pesar de sus inicios modestos, Derek Redmond encontró en el deporte la manera de destacarse y superar las circunstancias desafiantes que enfrentaba. Su determinación y pasión por el atletismo se manifestaron desde sus primeros años, sentando las bases para una carrera llena de logros y desafíos superados.

La influencia positiva de su familia y su entorno cercano fue fundamental en la formación de su carácter y su disciplina, convirtiéndose en pilares que lo acompañarían a lo largo de toda su vida y carrera deportiva.

Interés y participación temprana en el atletismo

Desde su adolescencia, Derek Redmond demostró un talento natural para el atletismo. Su dedicación y esfuerzo lo llevaron a destacarse en competiciones locales y nacionales, atrayendo la atención de entrenadores y atletas más experimentados. Su pasión por correr se convirtió en una parte integral de su identidad, impulsándolo a perseguir sus sueños de triunfo en el ámbito deportivo.

Con el apoyo de su familia y entrenadores, Derek Redmond se enfocó en perfeccionar su técnica y mejorar su rendimiento en cada competición. Su compromiso con el atletismo lo llevó a representar a su país en numerosas competencias internacionales, forjando una reputación como un corredor destacado y un competidor feroz.

El camino de Derek Redmond hacia la cima del atletismo estuvo marcado por innumerables horas de entrenamiento, sacrificio y determinación. Estos años de dedicación y esfuerzo lo prepararon para enfrentar los desafíos que lo aguardaban en el escenario olímpico.

Desafíos y obstáculos superados

A lo largo de su carrera, Derek Redmond se enfrentó a numerosos obstáculos, tanto físicos como emocionales. Sin embargo, uno de los momentos más emblemáticos que lo catapultó a la fama mundial ocurrió durante los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En la semifinal de los 400 metros, Derek sufrió una lesión que lo dejó cojeando por la pista, pero su determinación lo llevó a cruzar la meta con la ayuda de su padre, en una imagen que perduraría en la memoria de millones de personas en todo el mundo.

Este momento icónico no solo puso de manifiesto la fuerza de voluntad y el espíritu indomable de Derek Redmond, sino que también lo elevó a la categoría de símbolo de perseverancia y superación. Su valentía y determinación en medio de la adversidad inspiraron a personas de todas las edades y continentes, dejando un legado imborrable en la historia del deporte.

A pesar de las dificultades y contratiempos a lo largo de su carrera, Derek Redmond demostró que la verdadera grandeza no se define por las medallas o récords, sino por la fuerza interior, el coraje y la voluntad inquebrantable de seguir adelante, incluso en los momentos más difíciles.

Formación deportiva y primeros logros

Derek Redmond nació el 3 de septiembre de 1965 en Bletchley, Inglaterra, y desde temprana edad mostró un talento innato para el atletismo. Su formación deportiva comenzó en la escuela, donde destacó como velocista. A los 19 años, en 1984, participó en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, donde formó parte del equipo británico de relevos 4x400 metros, obteniendo la medalla de plata.

Este logro marcó el inicio de una carrera prometedora en el atletismo de alto rendimiento. Después de su destacada participación en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, Derek Redmond continuó cosechando éxitos en su carrera deportiva.

En 1985, en el Campeonato Mundial de Atletismo en Helsinki, ganó la medalla de oro en la misma disciplina, los relevos 4x400 metros, consolidando su posición como uno de los atletas más destacados de su generación. Sus logros en competencias nacionales e internacionales lo posicionaron como una figura prominente en el atletismo británico y un referente a nivel mundial.

La formación deportiva de Derek Redmond estuvo marcada por una disciplina férrea, un entrenamiento constante y una mentalidad enfocada en la superación personal. Sus primeros logros no solo evidenciaron su talento innato, sino también su determinación para alcanzar la excelencia en el deporte de alto rendimiento.

Estos primeros años sentaron las bases para lo que sería una carrera llena de momentos memorables y un legado que trascendería las pistas de atletismo.

Carrera Deportiva de Derek Redmond

Participación en los Juegos Olímpicos

Derek Redmond, el famoso atleta británico, participó en los Juegos Olímpicos de 1988 en Seúl, Corea del Sur. En esa ocasión, compitió en la carrera de 400 metros, representando a su país con gran determinación y espíritu deportivo.

Redmond también formó parte del equipo británico de relevos 4x400 metros en los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona, España, donde lamentablemente sufrió una lesión que marcó un momento histórico en el mundo del deporte.

Con su participación en dos Juegos Olímpicos, Derek Redmond dejó una huella imborrable en el ámbito deportivo, demostrando su compromiso y dedicación a lo largo de su carrera como atleta de élite.

Preparación y entrenamiento

La preparación y el entrenamiento de Derek Redmond para los Juegos Olímpicos requirieron una disciplina férrea y un enfoque inquebrantable. Como atleta de alto rendimiento, Redmond se sometió a rigurosas sesiones de entrenamiento físico y mental para alcanzar su máximo potencial.

Además de su entrenamiento físico, Redmond también se enfocó en el fortalecimiento de su mente, cultivando la determinación y la resistencia necesarias para competir en el escenario olímpico. Su dedicación y perseverancia son ejemplos inspiradores para atletas de todas las disciplinas.

El apoyo de su familia, especialmente el de su padre, Jim Redmond, quien también fue su entrenador, fue fundamental en su preparación para los Juegos Olímpicos. Juntos, enfrentaron desafíos y celebraron triunfos, forjando un vínculo indestructible que se vería reflejado en un momento conmovedor durante su carrera en Barcelona.

Descripción detallada de la carrera memorable

La carrera memorable de Derek Redmond en los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona es un relato de determinación, coraje y el inquebrantable espíritu humano. Durante la competencia de los 400 metros, Redmond sufrió una lesión que lo dejó en el suelo, enfrentando un momento desgarrador en su carrera deportiva.

A pesar del dolor y la adversidad, Derek Redmond se puso de pie y decidió completar la carrera. Con el apoyo inquebrantable de su padre, quien lo acompañó en la pista, Redmond cruzó la línea de meta entre aplausos y lágrimas, demostrando al mundo entero el poder de la voluntad y la determinación.

Este acto de valentía y perseverancia se convirtió en un símbolo de inspiración y resiliencia, dejando una huella imborrable en la historia de los Juegos Olímpicos y en el corazón de millones de personas en todo el mundo.

Impacto en el mundo del deporte

Derek Redmond dejó una huella imborrable en el mundo del deporte, convirtiéndose en un símbolo de determinación y superación. Su conmovedora actuación en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 trascendió las fronteras del atletismo para inspirar a millones de personas en todo el mundo. Su valentía al rehusarse a abandonar la carrera, a pesar de la lesión que lo aquejaba, lo catapultó a la fama y lo convirtió en un ejemplo de resiliencia y espíritu deportivo.

El impacto de la carrera de Derek Redmond no se limitó a su propia historia, sino que resonó en la comunidad deportiva global, recordándonos que el verdadero significado de la competencia va más allá de la mera victoria. Su determinación para completar la carrera, con la ayuda de su padre, se convirtió en un símbolo de la lucha contra la adversidad y un recordatorio de que el espíritu deportivo abarca mucho más que el rendimiento físico.

El legado de Derek Redmond en el mundo del deporte perdura hasta el día de hoy, sirviendo como recordatorio de que la verdadera grandeza no se mide solo en medallas, sino en la fortaleza de voluntad y el coraje para enfrentar desafíos insuperables. Su historia continúa inspirando a atletas y espectadores por igual, recordándonos que la verdadera victoria a veces radica en la valentía de seguir adelante, a pesar de las circunstancias adversas.

Legado y Reconocimientos

Influencia en la comunidad deportiva

La historia de Derek Redmond ha dejado una huella imborrable en la comunidad deportiva, sirviendo como un ejemplo inspirador de determinación, resistencia y espíritu deportivo. Su inquebrantable voluntad de terminar la carrera a pesar de la adversidad ha motivado a atletas de todo el mundo a superar obstáculos y a no rendirse ante la adversidad. Su impacto ha trascendido las fronteras del atletismo, convirtiéndolo en un símbolo de perseverancia y valentía en todos los ámbitos de la vida.

Las imágenes de su padre corriendo a su lado para apoyarlo en su momento de necesidad han resonado en la comunidad deportiva, recordándonos la importancia del apoyo incondicional y el amor familiar en la búsqueda de metas y sueños. Esta escena conmovedora ha inspirado a entrenadores, padres, y atletas a nivel mundial, fortaleciendo el valor del compañerismo, la solidaridad y el sacrificio en el deporte.

La determinación de Redmond y su impacto en la comunidad deportiva lo han convertido en un referente atemporal, cuyo legado continúa motivando a generaciones de atletas a superar desafíos y a perseguir sus sueños con pasión y convicción.

Premios y honores recibidos

Derek Redmond ha sido merecedor de numerosos premios y honores en reconocimiento a su destacada carrera deportiva y su increíble muestra de valentía y determinación en los Juegos Olímpicos de 1992. Su impacto trascendental en el mundo del deporte lo ha hecho merecedor de galardones que van más allá de sus logros atléticos, reconociendo su influencia como un modelo a seguir para atletas y personas de todas las edades.

Entre los reconocimientos más destacados se encuentran premios a la perseverancia, al espíritu deportivo y a la superación personal, otorgados por instituciones deportivas, organizaciones benéficas y entidades gubernamentales. Estos premios reflejan el impacto perdurable de Redmond en la comunidad deportiva y su legado como un ejemplo de determinación y coraje para superar los desafíos de la vida.

Su contribución al mundo del deporte y su influencia positiva en la sociedad han sido ampliamente reconocidas a través de distinciones que resaltan su valentía, su ética de trabajo y su inspiradora historia de superación.

Percepción actual de su carrera y ejemplo de superación

La carrera de Derek Redmond es percibida en la actualidad como un ejemplo icónico de superación personal y resiliencia, trascendiendo el ámbito deportivo para inspirar a personas de todas las edades y condiciones. Su valentía al enfrentar la adversidad y su determinación para completar la carrera a pesar de la lesión lo han convertido en un símbolo perdurable de perseverancia y fuerza de voluntad.

Su historia continúa siendo utilizada en conferencias, programas educativos y campañas de motivación, sirviendo como un recordatorio poderoso de que los obstáculos pueden ser superados con determinación, apoyo y fe en uno mismo. A través de su ejemplo, Redmond ha contribuido a cambiar la percepción de la discapacidad y a fomentar una mentalidad de resiliencia y superación en la sociedad.

La historia de Derek Redmond es un testimonio conmovedor de la capacidad humana para sobreponerse a las dificultades y alcanzar la grandeza, inspirando a individuos de todas las esferas de la vida a perseguir sus metas con valentía y convicción.

Impacto en futuras generaciones

Derek Redmond dejó un legado indeleble en el mundo del deporte y más allá. Su valentía y determinación en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 continúan inspirando a atletas y espectadores de todo el mundo. Su ejemplo de superación personal y la demostración de que el verdadero espíritu deportivo va más allá de la victoria o la derrota, ha dejado una huella imborrable en las generaciones futuras.

Su impactante acto de resistencia y amor por el deporte sigue siendo recordado en la actualidad, sirviendo como recordatorio de que la fuerza de voluntad y el coraje pueden superar cualquier obstáculo. Esta historia ha sido utilizada en innumerables ocasiones como ejemplo de superación en conferencias motivacionales, programas educativos y campañas de concienciación sobre la importancia de la resiliencia y la perseverancia en la vida diaria.

El legado de Derek Redmond persiste como un faro de esperanza para aquellos que enfrentan desafíos y adversidades, recordándoles que no hay límites para lo que se puede lograr con determinación y espíritu indomable. Su historia continúa siendo transmitida de generación en generación, inspirando a personas de todas las edades a nunca rendirse, sin importar las circunstancias.

Reflexión Personal

La historia de Derek Redmond es un ejemplo inspirador de determinación, valentía y superación. Su carrera en los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona es recordada por su demostración de fuerza y voluntad inquebrantable. Derek, a pesar de sufrir una lesión en el tendón de la corva durante la carrera de 400 metros, decidió continuar la competencia, demostrando la importancia de la resiliencia y el poder de la voluntad.

El incidente de Derek Redmond nos recuerda que, en la vida, enfrentaremos desafíos inesperados y situaciones que parecen insuperables. Sin embargo, la historia de Derek nos enseña que, a través de la fuerza de voluntad y la determinación, podemos superar obstáculos aparentemente insuperables y alcanzar el éxito a pesar de las adversidades. Su historia es un recordatorio de que, en los momentos más oscuros, la resiliencia y la voluntad pueden ser nuestros aliados más poderosos.

La lección que podemos aprender de la valiente actuación de Derek Redmond es que, incluso en las circunstancias más desafiantes, la voluntad inquebrantable puede llevarnos a logros extraordinarios. Su historia es un testimonio de la capacidad humana para superar la adversidad y alcanzar metas que parecían inalcanzables.

Valores personales y profesionales que representa su carrera

Legado en el mundo deportivo

El legado de Derek Redmond en el mundo deportivo es innegable, ya que su determinación y valentía en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 lo convirtieron en un símbolo de inspiración para atletas y espectadores de todo el mundo. Su demostración de resistencia y espíritu deportivo dejó una marca imborrable en la historia olímpica, recordándonos que la verdadera grandeza no solo se encuentra en la victoria, sino también en la capacidad de sobreponerse a la adversidad.

La valentía mostrada por Redmond al levantarse y cruzar la línea de meta, apoyado por su padre, trascendió el ámbito deportivo y se convirtió en un ejemplo perdurable de determinación inquebrantable. Su legado sirve como recordatorio de que el espíritu olímpico va más allá de la competencia y se enraíza en la fuerza interior de los atletas para superar desafíos inimaginables.

El impacto de la carrera de Derek Redmond sigue resonando en el mundo deportivo, recordándonos que el verdadero triunfo a menudo radica en la capacidad de superar la adversidad y perseverar, más allá de los resultados en el marcador. Su legado continúa inspirando a generaciones de atletas a enfrentar los desafíos con coraje, determinación y un espíritu inquebrantable.

Conclusión

Resumen de la carrera y legado de Derek Redmond

Derek Redmond, un atleta británico de élite, es conocido por su inolvidable carrera en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992. En la semifinal de los 400 metros, Redmond sufrió una lesión en el tendón de la corva, pero decidió completar la carrera con la ayuda de su padre, quien lo acompañó a lo largo de la pista. Este acto de determinación y perseverancia dejó una marca indeleble en la historia del atletismo y sirve como testimonio del poder de la voluntad humana.

Derek Redmond representó a su país en varios campeonatos mundiales y europeos, demostrando una notable habilidad atlética y un espíritu competitivo. A pesar de sus desafíos físicos, su legado trasciende las barreras del deporte y continúa inspirando a atletas y personas en todo el mundo.

La carrera de Derek Redmond es un recordatorio conmovedor de que la determinación y el coraje pueden superar cualquier obstáculo, y su historia perdurará como un ejemplo perdurable de espíritu deportivo y superación personal.

Impacto en el ámbito deportivo y más allá

El impacto de la carrera de Derek Redmond trasciende el ámbito deportivo, ya que su historia ha inspirado a innumerables personas a nivel mundial. Su valentía y determinación han sido fuente de motivación para atletas, entrenadores y espectadores, sirviendo como un recordatorio poderoso del espíritu humano inquebrantable.

A lo largo de los años, la historia de Redmond ha sido utilizada en conferencias motivacionales, programas de desarrollo personal y material educativo, demostrando su influencia duradera más allá de las pistas de atletismo. Su legado continúa resonando en la sociedad, transmitiendo un mensaje de resiliencia y perseverancia que trasciende las fronteras del deporte.

El impacto de Derek Redmond ha dejado una huella perdurable en el ámbito deportivo y más allá, recordando a las personas que el verdadero poder de la voluntad puede superar incluso los desafíos más desalentadores.

Relevancia continua en la historia de las Olimpiadas

La carrera de Derek Redmond en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 ha sido inmortalizada como un momento icónico en la historia de las Olimpiadas. Su demostración de valentía y determinación en medio de la adversidad lo ha convertido en un símbolo perdurable de la esencia misma de los Juegos Olímpicos.

La historia de Redmond continúa siendo recordada en cada edición de los Juegos Olímpicos, sirviendo como un recordatorio conmovedor de la capacidad del espíritu humano para superar desafíos. Su legado perdura en la comunidad olímpica, recordando a atletas y espectadores la verdadera magnitud del sacrificio y la determinación en la búsqueda de la grandeza deportiva.

La relevancia continua de Derek Redmond en la historia de las Olimpiadas confirma su lugar como una de las figuras más inspiradoras y perdurables en el mundo del deporte olímpico, dejando un impacto indeleble en la narrativa de superación y valentía en el escenario mundial.

Importancia de su historia en Vidas Ilustres

Derek Redmond es una figura emblemática cuya historia ejemplifica el espíritu de superación y determinación, valores fundamentales en la vida de cualquier persona. Su impactante carrera en las Olimpiadas de Barcelona 1992 es un recordatorio poderoso de la fuerza de la voluntad humana y la capacidad de sobreponerse a la adversidad. Su historia es un testimonio inspirador que muestra cómo la determinación y el coraje pueden llevar a logros extraordinarios, convirtiéndola en una narrativa esencial para Vidas Ilustres.

Al destacar la experiencia de Derek Redmond, Vidas Ilustres ofrece a sus lectores un ejemplo concreto de resiliencia y valentía, enriqueciendo su compendio de biografías con una historia que trasciende las barreras del deporte para inspirar a personas de todas las edades y ámbitos de la vida.

Derek Redmond no solo representa la lucha incansable por alcanzar metas personales, sino que su historia encarna la esencia misma de los Juegos Olímpicos: la perseverancia, el sacrificio y la determinación.

Al incluir la biografía de Derek Redmond en Vidas Ilustres, se resalta la importancia de honrar a aquellos atletas cuyas hazañas van más allá de la competencia deportiva, convirtiéndose en un legado que trasciende el tiempo.

Su historia no solo es relevante para los amantes del deporte, sino que también ofrece lecciones de vida invaluables para todos aquellos que buscan inspiración y motivación para superar desafíos personales.

En este sentido, la inclusión de la biografía de Derek Redmond en Vidas Ilustres enriquece el contenido del sitio al presentar un relato que va más allá del deporte, tocando fibras sensibles y motivando a los lectores a alcanzar sus propias metas con determinación y valentía. La historia de Derek Redmond es un testimonio conmovedor que trasciende la mera narrativa deportiva, convirtiéndose en un símbolo de fortaleza y superación.

Al presentar su biografía en Vidas Ilustres, se ofrece a los lectores la oportunidad de conocer a un verdadero héroe moderno cuya historia inspira, motiva y resuena en el corazón de quienes buscan ejemplos de resiliencia y coraje. La inclusión de la historia de Derek Redmond en Vidas Ilustres amplía la perspectiva del sitio al abordar la influencia positiva que las personalidades influyentes en el ámbito deportivo pueden tener en la sociedad, destacando la importancia de resaltar no solo los logros atléticos, sino también las cualidades humanas que hacen de estas figuras ejemplos a seguir para las generaciones presentes y futuras.

Preguntas frecuentes

1. ¿Quién es Derek Redmond?

Derek Redmond es un atleta británico, reconocido por su participación en competiciones de atletismo, especialmente en carreras de velocidad.

2. ¿Por qué la carrera de Derek Redmond es tan memorable?

La carrera de Derek Redmond es memorable debido a su actuación en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, donde sufrió una lesión en plena competencia y, a pesar del dolor, recibió ayuda de su padre para terminar la carrera.

3. ¿Qué lección se puede aprender de la carrera de Derek Redmond?

La carrera de Derek Redmond enseña la importancia de la perseverancia y la determinación frente a la adversidad.

4. ¿Cuál fue el impacto de la carrera de Derek Redmond en el mundo del deporte?

La carrera de Derek Redmond tuvo un impacto significativo al inspirar a atletas y espectadores, convirtiéndose en un símbolo de resiliencia y superación.

5. ¿Derek Redmond continuó participando en competencias deportivas después de su carrera memorable?

Sí, Derek Redmond continuó compitiendo y participando en eventos deportivos, demostrando su compromiso con el atletismo a pesar de los desafíos que enfrentó.

Reflexión final: El poder de la voluntad en la vida de Derek Redmond

La historia de Derek Redmond nos recuerda que el poder de la voluntad y la determinación sigue siendo relevante en la actualidad, especialmente en un mundo lleno de desafíos y adversidades inesperadas.

La fuerza interior de Derek Redmond para superar la adversidad continúa inspirando a personas de todo el mundo. Como dijo Redmond: El único límite para el impacto de la voluntad humana es la propia mente.

Invitamos a cada lector a reflexionar sobre cómo la historia de Derek Redmond puede influir en su propia vida, recordando que la voluntad inquebrantable puede llevarnos a superar cualquier obstáculo, por más difícil que parezca.

¡Gracias por ser parte de la comunidad de Vidas Ilustres!

Has llegado al final de este inspirador artículo sobre el poder de la voluntad, y estamos emocionados de que hayas compartido este momento con nosotros. ¿Por qué no compartes esta historia de determinación en tus redes sociales para inspirar a tus amigos y seguidores? Tal vez también puedas sugerirnos otras historias de personas extraordinarias que han superado grandes desafíos gracias a su voluntad inquebrantable. ¡Estaremos atentos a tus comentarios y aportes para futuros contenidos!

¿Qué te ha parecido la increíble carrera de Derek Redmond? ¿Has experimentado situaciones similares de superación? ¡Comparte tus pensamientos con nosotros en los comentarios!

Si quieres conocer otros artículos parecidos a El Poder de la Voluntad: Derek Redmond y su Inolvidable Carrera puedes visitar la categoría Deporte e Historia.